El concreto "verde" podría ser un factor de cambio para la industria de la construcción

Los científicos han estado jugando con el concreto en un esfuerzo por mejorar el material de construcción más ampliamente utilizado en el mundo - y han logrado algunos éxitos notables.

Las nuevas formas de concreto pueden atrapar y almacenar el dióxido de carbono, descomponer los contaminantes de los gases de escape y ayudar a proteger la infraestructura envejecida sellando las grietas a medida que se forman. Y ahora los científicos en el Reino Unido han desarrollado un concreto "verde" que dicen es más amigable con el medio ambiente que la materia ordinaria, así como más durable y más del doble de fuerte.

"No esperábamos que fuera tan fuerte", dijo la profesora Mónica Craciun, profesora de nanoingeniería de la Universidad de Exeter y miembro del equipo de investigación responsable del nuevo material. En una declaración escrita, calificó el material como "un absoluto cambio de juego" y dijo que se podría poner en marcha una empresa afiliada a una universidad para venderlo a finales de año, aunque otros expertos hicieron una evaluación más mesurada del potencial comercial inmediato del material.

La nueva forma de concreto se parece al concreto ordinario pero obtiene sus propiedades especiales de la adición de escamas microscópicas de grafeno, una forma de carbono que es uno de los materiales más fuertes del mundo. Una mayor resistencia significa que se necesitaría menos material para construir paredes y otras estructuras. Esto es significativo ya que la fabricación de cemento -el principal ingrediente del concreto- representa el 5 por ciento de las emisiones mundiales de dióxido de carbono, un gas de efecto invernadero.

Y si las paredes y otros componentes de los edificios pueden hacerse más delgados, se abren nuevas posibilidades de diseño para los arquitectos y constructores que trabajan con hormigón.

Craciun dijo que el compuesto de concreto y grafeno es cuatro veces más resistente a la infiltración de agua que el concreto ordinario, lo que sugiere que los edificios y la infraestructura hechos de él podrían resistir mejor con el tiempo, especialmente en zonas inundadas. El material compuesto es también más elástico que el concreto ordinario, lo que significa que podría ser una mejor opción para proyectos de construcción en áreas propensas a terremotos.

Y como mejor conductor de la electricidad que su homólogo convencional, el material compuesto podría encontrar nuevas aplicaciones sorprendentes. Craciun prevé carreteras cuyas superficies podrían ser electrificadas para que se calienten y derritieran la nieve y el hielo.

El Dr. Franz-Josef Ulm, director de la facultad del Centro de Sustentabilidad del Concreto del MIT, piensa que las paredes hechas de concreto eléctricamente conductor podrían servir como baterías para almacenar la energía eléctrica captada por los paneles solares. "El concreto está en todas partes en sus sistemas de paredes y pisos", dijo. "¿Por qué no usas eso como una batería activa?"

Pero Ulm expresó dudas sobre la viabilidad comercial del compuesto concreto-grafeno, prediciendo que debido al alto costo del grafeno era más un "material conceptual" que uno que pronto saldría al mercado

El Dr. Rackel San Nicolas, ingeniero civil de la Universidad de Melbourne en Australia y experto en materiales de construcción avanzados, se hizo eco de la evaluación de Ulm. "No creo que sea algo que esté listo para salir ahora mismo", dijo sobre el nuevo material en un correo electrónico a NBC News MACH. Se necesitan más investigaciones, dijo, incluyendo estudios para determinar si las diminutas partículas de grafeno representarían algún riesgo para la salud o el ambiente.